El postrer Adán es espíritu vivificante
El
primer hombre, Adán, llegó a ser un alma viviente y el postrer Adán,
Cristo, es espíritu vivificante. Uno es alma viviente y el otro,
espíritu vivificante. El primer hombre, el terrenal, el segundo hombre,
el celestial; así como es el terrenal así son los terrenales, así como
es el celestial son los celestiales. El problema que existe, es la
naturaleza que cargamos. Porque la naturaleza determina las acciones y
la esencia. Como seres humanos, la naturaleza es diferente a la del
mundo animal. Las diferentes especies del reino animal, realizan su
comportamiento según su naturaleza. Las aves vuelan, y comen diferente a
los felinos, se mueven diferente porque su naturaleza, determina su
accionar.
Solo
hay dos tipos de seres humanos, pueden tener una de dos naturalezas. Por
un lado, aquellos que caminan, que piensan, que actúan, según la
naturaleza de Adán. Debemos saber que todos los seres humanos nacimos
con esa naturaleza, es algo que vino con nosotros. Nacimos con tendencia
al pecado, nos lo heredó el primer hombre, llamado Adán. Adán se separa
de su comunión con Dios y todos sus hijos nacimos con esa naturaleza,
con muerte en el espíritu. Pero no todos tenemos esa naturaleza. Esa
naturaleza, es la única de la creación que puede cambiar, y esto, solo
por un acto de Dios directamente.
Por
otro lado, Jesucristo, el segundo Adán, vino en forma de hombre, aunque
nació de su madre María, no es producto de sus padres. Jesús nace como
el modelo de una nueva creación en la tierra. Jesús es un nuevo hombre,
que no camina como Adán, no piensa como Adán, no tiene los mismos deseos
pecaminosos como Adán; porque es un espíritu que tiene vida, María le
dio un cuerpo a Jesús, pero el espíritu que está en Él, es el Espíritu
de Dios.
Cuando
creímos en Cristo, el mismo espíritu de Él, se depositó en nosotros y
en ese momento Dios cambió nuestra naturaleza. Dejamos de tener la
naturaleza de Adán y comenzamos una vida en el espíritu, que ahora
habita en los que creemos en Él. Las enseñanzas de Pablo, están
encaminadas a desarrollar esa nueva naturaleza en cada hijo de Dios.
1 Corintios 15:45 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
45 Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante.
1 Corintios 15:46-48 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
46 Mas lo espiritual no es primero, sino lo animal; luego lo espiritual.
47 El primer hombre es de la tierra, terrenal; el segundo hombre, que es el Señor, es del cielo.
48 Cual el terrenal, tales también los terrenales; y cual el celestial, tales también los celestiales.
0 comentarios :
Publicar un comentario